lunes, 12 de septiembre de 2011

El PSOE roto por cataluña


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Junto al pulso golpista que Artur Mas está echando al Estado de Derecho con pulsión nítidamente liberticida, otro hecho relevante es la sumisión al secesionismo y el respaldo al desacato que ha adoptado lo que queda del mermado PSC, con el gris Montilla y la desnortada Carme Chacón, con el agravante, en este caso, de que forma parte del Gobierno de España en puesto de tanta relevancia y responsabilidad como el Ministerio de Defensa.


Aunque el adelanto electoral ha obligado al PSC a retrasar un Congreso que se presenta problemático, son muy fuerte los indicios de que va romper amarras y anclajes con el PSOE. Por de pronto, ya ha anunciado que sus diputados formarán grupo parlamentario propio y que sus tesis estarán más cerca del nacionalismo catalán que de cualquier postura de Estado.

Son datos que los electores de toda España deberían tener en cuenta. El PSOE va a presentarse en toda España, con Rubalcaba como candidato, menos en Cataluña, donde el secesionismo del socialismo catalán empieza por la ruptura de la unidad partidaria.

También todos los españoles, incluidos los votantes socialistas de otras convocatorias, deberían tener en cuenta que el PSC es ya un peligro serio para la unidad nacional y para la convivencia, pues lo que diferencia la civilización de la barbarie es el Estado de Derecho y estamos en pleno reto, en pleno cuarteamiento, con el respaldo notorio de los socialistas catalanes.

El PSC se ha beneficiado durante años de la confusión de ser un partido españolista, lo que no ha sido nunca cierto, pero ahora es más evidente que nunca. Históricamente, con su diputada Marta Mata, el PSC fue el primero en propugnar la inmersión lingüística. El 22 de mayo los socialistas catalanes sufrieron una derrota en términos de hecatombe, pero lejos de aprender la lección de las urnas, están intensificando sus errores. La evidencia es que el PSOE ya está roto por Cataluña.
Enrique de Diego

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