España no se negocia

                                                               
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Hace unos días, en el programa A Fondo, que dirije Enrique de Diego, se comentaba que la oración "La muerte no es el final", Juan Carlos no ha aprendido a cantarla. Hoy todos aquellos que nos rodeaban y nosotros mismos, a pleno pulmón y con la solemnidad y emoción que requiere la hemos entonado.
Nuestras voves pidiendo justicia, nuestros viva a España, a la siempre honrada Guardia Civil, a cada nombre de los niños asesinados por ETA, iban acompañados del lema "España no se negocia".


Porque esa es la razón que nos une.
Porque ese es el motivo de los asesinatos, extorsiones, de ETA.
Porque la sangre que se ha vertido es la de los nuestros, los españoles.


Las víctimas no son gente distinta a tí, a vosotros. Son los nuestros, y los nuestros han sido arrebatados de nuestro lado para negociar la división de esta Nación.
Justicia para ellos, dignidad que ponemos con nuestro corazón valiente y encogido de emoción, memoria que cada día vela por no olvidar.
El chivato candidato del PSOE, y todos aquellos que sin nuestro permiso, sin el permiso de las víctimas, llevan demasiados años negociando, son culpables de alta traición.


No se irán de rositas.
Somos mucha España y mucho español para permitirlo.
¡Viva España!Hace unos días, en el programa A Fondo, que dirije Enrique de Diego, se comentaba que la oración "La muerte no es el final", Juan Carlos no ha aprendido a cantarla. Hoy todos aquellos que nos rodeaban y nosotros mismos, a pleno pulmón y con la solemnidad y emoción que requiere la hemos entonado.
Nuestras voces pidiendo justicia, nuestros viva a España, a la siempre honrada Guardia Civil, a cada nombre de los niños asesinados por ETA, iban acompañados del lema "España no se negocia".
Por que esa es la razón que nos une.
Por que ese es el motivo de los asesinatos, extorsiones, de ETA.
Por que la sangre que se ha vertido es la de los nuestros, los españoles.
Las víctimas no son gente distinta a tí, a vosotros. Son los nuestros, y los nuestros han sido arrebatados de nuestro lado para negociar la división de esta Nación.
Justicia para ellos, dignidad que ponemos con nuestro corazón valiente y encogido de emoción, memoria que cada día vela por no olvidar.
El chivato candidato del PSOE, y todos aquellos que sin nuestro permiso, sin el permiso de las víctimas, llevan demasiados años negociando, son culpables de alta traición.
No se irán de rositas.
Somos mucha España y mucho español para permitirlo.