La Sociedad Civil ya ha reflexionado

                      
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Hace años, en concreto, el 23 de noviembre de 2008, a través de la radio, del programa A Fondo, que dirije Enrique de Diego, se convocó a la sociedad civil para decir no al uso abusivo de nuestros impuestos contra quienes precisamente los pagamos.
Impresionante la imagen que muchos guardamos en nuestra retina, con la Plaza de Colón llena, como si los partidos, dueños y señores de todo medio de comunicación, hubieran hecho labor en pro de esa concentración. Y lo hicimos sin medios.
Hoy, cuatro años más tarde, el ninguneo de esa y otra muchas posteriores, amén de las convocadas por víctimas del terrorismo; acallando así la voz de las miles, millones de razones que nos asisten, debe ser la fuerza con la que nos enfrentamos al reto del día 21.

Queremos exigimos, un marco de libertad.


Queremos, exigimos, el cierre de las autonomías. Por insostenibles, por ser causantes de las mayores diferencias entre españoles de cada región. Por certificar la venta de España como Nación. Porque ni las amanezas, ni los asesinatos, ni los clientelismos, van a poder con la sociedad civil que tan gloriosas hazañas lleva cosechando.

Ahí está la foto de las buenas gentes de las clases medias llegando a Moncloa el 7 de noviembre de 2009. Vinieron de Levante, de todos los puntos de Madrid, de León, de ambas Castillas, de Cataluña, de Vascongadas...
Nosotros hemos reflexionado hace muchos años. Nosotros, encabezados por Enrique de Diego que ahora empieza a ver como todo su discurso, y postulados, son tomados y aplaudidos, aunque no sean capaces de llevarlos a cabo.
Queremos, exigimos de quienes vayan a tomar las riendas de España el día 21, recuerden que nosotros no necesitamos, subvenciones, subsidios, viviendas, empresas, hospitales ni colegios o institutos. Si no que se favorezcan los marcos para poder dotarnos de todo ello.
Porque cuando se trabaja en libertad, todo esfuerzo es poco y el logro es cuantioso. Porque cuando se nos permite asumir el reto del trabajo, hemos levantado España con orgullo. Porque darnos pan y arrancarnos el cultivo, es propio de dictaduras o democracias degeneradas.
No nos emociona el ver palacetes convertidos en la oficina del concejal de turno. No nos conmueve el orgullo patrio ver tanto parlamento y coche oficial. No nos interesa más que la posibilidad de sentirnos hacedores de futuro.
Queremos y exigimos que no se vayan de rositas quienes han contribuido a la ruina de España. Porque nadie, nada les dío el poder para hacerlo.
Invitamos al nuevo Gobierno a sumarse a nuestras ganas de trabajar. Invitamos a los parlamentarios a comenzar la labor de servicio. Invitamos a la casta a desmantelarse y empezar de cero. Porque necesitamos, y por ello exigimos un estado pequeño, que vuelva a hacer de España una gran Nación.
Nosotros estamos dispuestos.


Clases Medias