El Ministro de Fomento se defiende hipócritamente de las acusaciones que le vinculan al Caso Campeón, ya que según el Mundo, Biancone ha alegado que su obligación es conocer proyectos que creen empleo.
Así se defiende el ¿presunto? sinvergüenza del ministro de la acusación de tráfico de influencias. Tras cuatro días en silencio se podría haber preparado algo mejor, se conoce que no le da para más sin dinero de por medio.
Así se defiende el ¿presunto? sinvergüenza del ministro de la acusación de tráfico de influencias. Tras cuatro días en silencio se podría haber preparado algo mejor, se conoce que no le da para más sin dinero de por medio.
El político profesional se ha debido pensar que los ciudadanos, a los que roba el dinero, no saben distinguir entre recibir empresarios y recogerlos en gasolineras previo pago a un familiar.
Lo curioso es que ya estamos tan acostumbrados a casos de este tipo, que no nos sorprenden los intentos de tomarnos el pelo de forma tan descarada.
Esperemos que al campeón le bajen pronto del podio.
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